Entradas

Les oiseaux...

Imagen

Le chat botté...

Imagen
Gustave Doré, El gato con botas

Wolfgang Amadeus Mozart, "Pequeña serenata nocturna"

Imagen

Verdi...

Imagen

¿Y la verdad?

Imagen
Firma de Virginia Woolf << Deseando la verdad, esperándola, destilando laboriosamente unas pocas palabras, deseando siempre (…), deseando siempre (…), deseando siempre verdad. Roja es la cúpula; de los árboles cuelgan monedas; el humo sale lento de las chimeneas; ladrido, alarido, grito. «Compro metal»… ¿Y la verdad? (…) Cacareada, leve cual hoja, rizada en los bordes, pasada por las ruedas, plateada, en casa o fuera de casa, reunida, esparcida, derrochada en diferentes platillos de la balanza, barrida, sumergida, desgarrada, hundida, ensamblada… ¿Y la verdad? >>. Virginia Woolf, Lunes o martes

El grito...

Imagen
Edvard Munch, El grito << De la misma forma que nadie ha muerto -dijo él- sin haber vivido un tiempo sobre la tierra, del mismo modo, nadie ha vivido en este mundo sin morir más tarde o más temprano. El mundo no es sino un camino de penas que nosotros , pobres peregrinos , vamos recorriendo de un extremo a otro . La muerte es el final de todos nuestros problemas terrenales >> . Geoffrey Chaucer, Cuentos de Canterbury

Revelando a Dalí

Imagen

No volveremos a vagar

Imagen
Lord Byron Así es, no volveremos a vagar Tan tarde en la noche, Aunque el corazón siga amando Y la luna conserve el mismo brillo. Pues así como la espada gasta su vaina, Y el alma consume el pecho, Asimismo el corazón debe detenerse a respirar, E incluso el amor debe descansar. Aunque la noche fue hecha para amar, Y los días vuelven demasiado pronto, Aún así no volveremos a vagar A la luz de la luna. Lord Byron

«Respirer Paris...

Imagen
...cela conserve l'âme». Victor Hugo

Un sueño

Imagen
Mihály Munkácsy,  Víctima de las flores ¡Recibe en la frente este beso! Y, por librarme de un peso antes de partir, confieso que acertaste si creías que han sido un sueño mis días. ¿Pero es acaso menos grave que la esperanza se acabe de noche o a pleno sol, con o sin una visión? Hasta nuestro último empeño es solo un sueño dentro de un sueño. Frente a la mar rugiente que castiga esta rompiente tengo en la palma apretada granos de arena dorada. ¡Son pocos! Y en un momento se me escurren y yo siento surgir en mí este lamento: ¡Oh Dios! ¿Por qué no puedo retenerlos en mis dedos? ¡Oh Dios! ¡Si yo pudiera salvar uno de la marea! ¿Hasta nuestro último empeño es solo un sueño dentro de un sueño? Edgar Allan Poe